Condenados / Condemned
Englsih 👈 En este mundo absurdo donde lo absurdo es creíble y alejado de lo fantástico, Montiel marcó el número que creía recordar. El teléfono timbraba, hacía ese sonido ronco que se escucha mientras se espera que una persona conteste. Una mujer recibió la llamada. Buenas tardes- dijo. Buenas tardes- respondió Montiel. Me gustaría hablar con el señor Carlos si se encuentra presente. Ella, que aún no había dicho su nombre, dijo que allí no vivía ningún Carlos y enganchó. Para Montiel, la oportunidad de ese día estaba perdida, no habría posibilidad de volver a llamar hasta el día siguiente y lo peor, ya había descartado todos los números que creía recordar, por eso al día siguiente volvió a marcar, otro intento, otra insistencia, no por gusto sino por necesidad. Contestó la misma dama, Carolina, se llamaba, pero como él no lo sabía, la llamó dulzura. Tal vez fue eso lo que hizo que ella no colgara el teléfono, aunque si ella hubiese sabido lo que haría luego de hablar