Flor de plástico


                                              

                 Hay ausencia tuya en el reflejo del espejo, solo queda colgando del perchero el cielo sin estrellas que me dejaste antes de irte. Raudo y veloz pasa el tiempo, dejando en la radio estancadas algunas muchas canciones de amor de esas que se entienden en los momentos tristes. Créeme que sé lo que te digo, he golpeado a la pared con los miles de segundos que me han sobrado luego de que la camisa que olvidaste  perdiera tu olor.  Creo que comenzaré a guardar los residuos de los segundos que me quedan por si algún día puedo armar un nuevo reloj. Voces optimistas advierten que el tiempo sana todas las heridas.  Pero el silencio no es una herida, el silencio es un par de oídos sordos que arañan los recuerdos en busca de oír una vocecilla. Eso es lo que sucede cuando la soledad se  enamora de uno y se empeña en tener celos hasta de la muerte. Aquí no pasa nada, esto es simplemente una queja que yo me hago para sentirme poeta.  Un poeta que juguetea con la muerte para perder el miedo. Mañana será otro día, largo y pesado, llegará un atardecer de esos en que el sol besa la rubia arena y revuelca los mares. Yo estaré frente a esa hermosa vista, sordo, sin decir una palabra, sepultando entre la sal de la mar todo aquello que tu marejada esculpió en mis rocas. Me doy pena entre tanto lamento, vestiré una gran sonrisa que será acariciada por el viento, le seré infiel al silencio teniendo un romance de sonido; taparé tu foto con alguna falsa obra de arte. Seguiré así por el mundo enamorado de la vida, dispuesto a decir adiós mil veces, ese será mi mejor esfuerzo por ser feliz, por sujetar otras manos y  por sofocar las ganas de olvidarte. Eso si, esto que he dicho lo haré desde mañana, porque hoy observo la flor que te regalé, aquella que te di diciéndote  que el día que se marchitara yo dejaría de amarte. Es curioso, pero sigue donde siempre, sobre la mesa, solo que la he puesto en agua, porque se está marchitando, aunque estoy consciente, de que esa flor, es de plástico.

Comentarios

  1. Hola, me dirijo a ti por este medio ya que no has dejado visible ninguna otra forma. La verdad es que la forma en que lo has presentado es totalmente desfavorable. Espero que mi comentario no sirva para que te molestes, ya que lo hago con la intención de ayudarte. Sí quieres saber de qué manera puedes ponerte en contacto franvitara1@hotmail.es y no te preocupes por nada no hay ningún interés oculto en mi ofrecimiento.

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  2. El cambio habla por sí solo.


    Saludos.

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    1. Saludos Francisco, le envié un correo electrónico el cual espero haya recibido. Estoy muy agradecido de sus consejos.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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